FILÓSOFOS




1.- René Descartes.

Descartes (1596-1650).

“… Descartes concibió a la ciencia como una pirámide cuya cúspide estaba ocupada por los principios o leyes más generales de la realidad; pero mientras Bacon llegaba a esa cúspide por medio de inducciones progresivas, basadas en series generosas de observaciones y experimentos, Descartes propuso que el conocimiento científico se inicia en la cumbre y de ahí procede hacia abajo, siguiendo el camino de la deducción, hasta llegar a la base, o sea la naturaleza real.” Pérez Tamayo (1998, p. 84).

Entre Bacon y Descartes vemos los criterios que irán dominando el pensamiento científico en relación con los métodos racionales para hacer ciencia. Estarán las líneas de científicos que considerarán la inducción como el camino de la misma, mientras otros considerarán a la deducción como la mejor vía.

“De importancia para el método científico, Descartes pensaba que los fenómenos macroscópicos podían explicarse a partir de interacciones microscópicas, analizadas en forma cuantitativa; de hecho, restringió el contenido de la ciencia a aquellas cualidades que pueden expresarse matemáticamente y compararse en forma de relaciones. Es por esta razón que se acepta que la filosofía de la ciencia de Descartes es una combinación de conceptos arquimedianos, pitagóricos y atomistas.” Pérez Tamayo (1998, p. 85).

El problema en la investigación sobre lo microscópico y lo macroscópico tiene su resonancia en la actualidad, ha creado la diferencia en cuanto al método que debe tener la ciencia para los nuevos conocimientos, sólo hay que ver el desarrollo actual de la misma con, por ejemplo, Ilya Prigogine y otros.

“Lo que Descartes dice es que sin contacto con la naturaleza, su método científico se detiene al nivel de lo que pudiera ser, o sea que llega al umbral de muchas realidades posibles, todas ellas igualmente compatibles con los principios generales generados intuitivamente; para continuar con la deducción es necesario determinar directamente cuál es la realidad verdadera, anotando con cuidado las condiciones en que tal realidad ocurre” Pérez Tamayo (1998, p. 87).

Descartes es uno de los pensadores que como vemos hace énfasis en el experimento, en una verdad a partir de la relación con la naturaleza que según su pensamiento es la que puede decidir sobre lo que se dice.

“Finalmente, conviene reiterar que, también en el caso de Descartes, el método científico que él propuso no coincide con el que él mismo siguió para hacer sus importantes contribuciones científicas, tanto en óptica como en geometría analítica; en otras palabras, Descartes es otro ejemplo de falta de correlación entre lo que el hombre de ciencia dice que hace y lo que realmente hace.” Pérez Tamayo (1998, p. 88).

2.- John Locke.

Locke (1632-1704).

Si todo proviene de la experiencia significa que lo que llamamos realidad es creado por la mente del hombre; todo conocimiento proviene de lo que hemos vivido, de lo que hemos hecho, que se convierte en sensaciones y percepciones.

“Nuestras ideas provienen de dos fuentes distintas, las sensaciones y la percepción de la operación de nuestra mente. Si sólo somos capaces de pensar con nuestras ideas, y todas las ideas provienen de la experiencia, es evidente que ninguna parte del conocimiento antecede a la experiencia.” Ruy Pérez Tamayo (1998, p. 90).

Según el empirismo el mundo exterior aunque exista no lo podemos conocer; sólo son ideas registradas en nuestra mente.

Lo que queda como cuestionamiento es cómo puede ser posible que sepamos que existe otra cosa distinta a las sensaciones y percepciones y no nos interese saber qué es. Tendremos explicaciones de lo que nuestra mente percibe; la otra pregunta sería y qué con las percepciones, son de acuerdo a algo, o nos darán conocimientos de qué.

3.- David Hume.

Hume (1711-1776).

“Hume llevó el empirismo de Locke y Berkeley hasta sus últimas consecuencias, haciéndolo al mismo tiempo congruente e increíble; de hecho, ni el mismo Hume pudo actuar en forma rigurosa de acuerdo con sus propias ideas, ni tampoco pudo encontrarle solución a los problemas creados por ellas.” Pérez Tamayo (1998, p. 100).

“…Hume define la causa como:

Un objeto precedente y contiguo a otro, y unido a él en la imaginación de tal manera que la idea de uno determina en la mente la formación de la idea del otro, y la impresión de uno la formación de una idea más viva del otro.

Esta conclusión de Hume tiene dos consecuencias importantes para la estructura del método científico: en primer lugar, se opone a la consideración de que los mismos efectos tengan siempre las mismas causas, o sea que se opone al concepto de la regularidad de la naturaleza; en segundo lugar, invalida el uso de la inducción por enumeración para alcanzar generalizaciones válidas en el conocimiento.” Pérez Tamayo (1998, pp. 102-104).

En la explicación que nos da Hume sobre la causalidad, considera que sí hay eventos que se siguen uno a otro, pero no expresa que exista una relación lineal de los mismos; se sabe que uno está junto al otro, pero no nos dice que los elementos de un fenómeno originen el otro fenómeno.

El concepto de regularidad de la naturaleza ha sido por mucho tiempo la base del método científico para las ciencias naturales. “El escepticismo de Hume lo lleva a negar la posibilidad del conocimiento racional y a postular que todo lo que creemos se basa más bien en nuestros sentimientos que en nuestra razón.” Pérez Tamayo (1998, p. 105).

En tiempos actuales vemos que Habermas en su propuesta de pragmática universal nos dice que la verdad se produce como consenso de una comunidad de investigadores.

4.- Ernrnanucl Kant.

Ernrnanucl Kant (1724-1804) y frontispicio de su libro Kritik der reinen vernunfl (1781).

Ernrnanucl Kant (1724-1804) y frontispicio de su libro Kritik der reinen vernunfl (1781).

“…en relación con el método científico sólo dos de sus libros son importantes, el famoso Crítica de la razón pura y el Prolegómenos para cualquier metafísica futura, el segundo de estos libros es un intento de simplificación y aclaración del primero. La tesis central de estos dos libros de Kant es que, si bien nada de nuestro conocimiento trasciende a la experiencia, una parte de él es a priori y no se infiere inductivamente a partir de la experiencia. La parte del conocimiento que es a priori incluye no sólo la lógica sino otras áreas que ni caen dentro, ni pueden deducirse, de ella.” Pérez Tamayo (1998, p. 107).

Kant, en su propuesta científica integra el conocimiento por experiencia con el conocimiento racional. ¿Cómo logra Kant resolver el problema? Creando formas puras de la inteligencia y formas puras de la sensibilidad.

“De acuerdo con Kant, el mundo exterior sólo causa la materia de las sensaciones mientras que nuestro aparato mental ordena esta materia en el espacio y en el tiempo y además le agrega los conceptos necesarios para que entendamos la experiencia.“ Pérez Tamayo, (1998, p. 109).

Según el pensamiento Kantiano de esta manera surgen las formas puras del entendimiento; conceptos a priori, y formas puras de la sensibilidad o categorías.

“De la interacción entre las intuiciones y las categorías a priori Kant propuso su doctrina de los esquemas para alcanzar los principios de la comprensión pura.” Pérez Tamayo (1998, p.110).

Con los dos tipos de formas; las del entendimiento y las de la razón Kant crea un esquema trascendental que es donde se unen las dos formas de categorías.

“Ésta fue la forma que al final tomó la respuesta de Kant a la crítica de Hume a la causalidad. El principio de la causalidad no debía buscarse por inducción a través de observaciones individuales por la sencilla razón de que no está ahí, sino que es una categoría a priori, una condición necesaria de la experiencia, localizada por Kant en el aparato mental del observador humano, que es totalmente incapaz de concebir fenómenos que no actúen dentro del principio de la causalidad.” Pérez Tamayo (1998, p. 110).

5.- John Stuart Mill.

Stuart Mill (1806-1837).

“La operación central en El sistema de Mill es la inducción, que descansa en el principio fundamental de la uniformidad de la naturaleza, que postula que lo ocurrido una vez volverá a ocurrir cuando las circunstancias sean suficientemente semejantes. Este principio es también empírico y se deriva de un proceso natural y primitivo de inducción, iniciado cuando observamos unas cuantas regularidades y predecimos que seguirán ocurriendo en el futuro; si nuestra predicción resulta correcta, a partir de ella se generaliza proponiendo que en vista de que algunos eventos se han dado en patrones recurrentes, todos los eventos futuros se darán también en patrones recurrentes. Pérez Tamayo (1998, p.123).

La ciencia actual se sigue desarrollando en el sistema de Mill y es lo que está sujeto a una gran controversia en que no se puede considerar a la inducción como la ley que nos dará la oportunidad de predecir todo lo que ocurrirá.

“Lo que en última instancia se desea en la ciencia (según Mill) es llegar a proposiciones como la siguiente: o A es la causa de a, o bien existen eventos sin causa, y como estamos seguros de que todos los eventos tienen causa, entonces A es la causa de a. Esto se logra por medio de métodos más elaborados de inducción, de los que Mill describió cinco, los famosos "cánones de la inducción" basados, como se mencionó antes, en la obra de Herschel.” Pérez Tamayo (1998, p. 123).

Los cánones de Mill se siguen enseñando en los cursos de lógica formal, unidos a la lógica Aristotélica y se enseñan porque la ciencia que aprenden los estudiantes de todos los niveles hasta los estudios superiores, explican la regularidad de la naturaleza como base de la inducción.

6.- Auguste Comte.

Comte (1788-1857).

“En relación con el método científico, el positivismo de Comte subraya que conforme los hechos se hacen más complejos, como los fenómenos fisiológicos, comparados con los astronómicos, también los métodos necesarios para estudiarlos aumentan en complejidad, como en el caso de la fisiología experimental, comparada con la simple observación de los movimientos planetarios. “Pérez Tamayo (1998, p. 143).

De acuerdo a lo anterior Auguste Comte entiende que todos los conocimientos. Todas las ciencias no son iguales, por eso vemos que propone métodos más complejos para ciencias más complejas.

“Los diferentes métodos mencionados por Comte son realmente tres: observación, experimentación y comparación.” Pérez Tamayo (1998, p. 143).

En realidad los métodos que propone Comte son etapas para la investigación.

“En resumen, el positivismo de Comte fue muchas cosas para mucha gente; su impacto en la filosofía de la ciencia y en la educación fue definitivamente mayor que el de otros sistemas filosóficos anteriores o de su tiempo, sobre todo en el mundo latino; desde luego, en América tuvo una influencia pública definitiva, especialmente en México y Brasil, que todavía hoy se nota.” Pérez Tamayo (1998, p. 146).

Cuando dice Pérez Tamayo que el Positivismo de Comte todavía hoy se nota en México y Brasil es porque todavía se les enseña, en el caso de México, el positivismo lógico en los cursos de lógica formal, como si las verdades de la ciencia actual se obtuvieran mediante la nueva lógica o lógica simbólica, que fue el positivismo lógico propuesto por Ludwig Wittgenstein y Bertrand Russell, también porque toda investigación tiene que ser de hechos observables.

7.- Ludwig Wittgenstein.

Wittgenstein (1889-1951).

“En su teoría del lenguaje como imagen, las proposiciones poseen una especie de estructura lógica que refleja la propia estructura lógica de la realidad, ya que se supone que tanto el lenguaje como el mundo comparten tal arquitectura.” Pérez Tamayo (1998, p. 177).

Wittgenstein comienza estableciendo una relación entre la realidad, la lógica y el lenguaje, considerando que los tres parten de una misma estructura.

“El lenguaje "ilustra" las configuraciones posibles en la naturaleza, y se dice que posee sentido o significado precisamente cuando hay la posibilidad de correlacionarlo con los hechos reales.” Pérez Tamayo (1998, pp. 177-179).

Wittgenstein no se interesa en cómo se llega a la “verdad” en la ciencia, se interesa por las expresiones que exponen esas verdades. El problema de este filósofo es la expresión de lo que suponemos encontramos en la realidad, con la configuración que hace el lenguaje para manifestarlas.

“La confrontación de las proposiciones con la realidad permite establecer si son verdaderas o falsas. Esto es lo más cerca que estuvo Wittgenstein del "principio de la verificabilidad" que, como veremos en un momento, el Círculo de Viena le atribuyó. En cambio, sobre la posible relación causal entre diferentes configuraciones del mundo exterior, la postura de Wittgenstein era idéntica a la de Hume, ya que negaba cualquier conexión lógica entre ellas:

Es imposible hacer cualquier inferencia a partir de la existencia de una configuración determinada, sobre la existencia de otra configuración completamente distinta.” Pérez Tamayo (1998, p. 179).

Lo que el lenguaje hace es mediante proposiciones representar la realidad; según Wittgenstein cuando se enfrentan proposiciones y realidad podemos obtener la verdad o falsedad de las proposiciones.

“A partir de que las proposiciones lógicas nos parecen válidas por razones "no lógicas" sino más bien por nuestra educación y medio cultural, de que las expresamos en un lenguaje que tiene sus propias reglas, que también se derivan de la práctica cotidiana, que nos ha enseñado que ciertas formas de expresión tienen sentido y otras no lo tienen, debe concluirse que el conocimiento científico reside, en última instancia, en la forma de la sociedad y en sus costumbres, especialmente en relación con el lenguaje.” Pérez Tamayo (1998, p. 182).

Vemos como Wittgenstein no entra a cuestionarse elementos como el experimento, las teorías, verificación: conceptos que son los que tratan tanto científicos como filosófos a la hora de querer dar una propuesta de qué es el método científico o de qué es la ciencia. De lo anterior podemos ver que para Wittgenstein lo que hay que tratar es la realidad que construye el hombre a partir del lenguaje.

“De manera que realmente el científico (y también el no científico) nunca "ve" pasivamente al mundo absorbiendo impresiones que posteriormente interpreta, como creían los empiristas y los positivistas, como Wittgenstein afirmó en su Tractatus y como defendieron los positivistas lógicos, sino que la observación es un proceso activo, matizado por las expectativas teóricas, las suposiciones culturales, los atributos del lenguaje, y otros factores más, tanto sociales como individuales; en otras palabras, la observación es un proceso conceptual que influye o determina la percepción. Como veremos en un momento, esto se opone al concepto de la estructura de las teorías científicas que postularon los positivistas lógicos, basados en el Tractatus de Wittgenstein.” Pérez Tamayo (1998, p. 182).

Es interesante la reflexión que hace Pérez Tamayo del pensamiento filosófico de Wittgenstein sobre lo que la ciencia es y por consiguiente de cómo se obtienen las verdades científicas. El problema es de cultura, de lo que la cultura nos enseña a observar, lo que la cultura nos enseña a percibir.

8.- Karl R. Popper.

Popper (1902-1997).

“Lo que encontró Popper hace casi 60 años lo sabemos todos hoy: en la física de Einstein las predicciones se formulaban de tal manera que la opción de no cumplirse era real, mientras que en las otras teorías "científicas" mencionadas, había explicaciones para cualquier clase de resultados; en otras palabras, ningún tipo posible de experiencia era incompatible con las otras tres teorías "científicas", que estaban preparadas para absorber y explicar cualquier resultado, incluyendo los contradictorios. Fue en esa época cuando Popper concluyó que la manera de distinguir a la ciencia verdadera de las seudociencias (el criterio de demarcación) es precisamente que la primera está constituida por teorías susceptibles de ser demostradas falsas poniendo a prueba sus predicciones, mientras que las segundas no son refutables; en otras palabras, la irrefutabilidad de una teoría científica no es una virtud sino un vicio, ya que la identifica como seudocientífica.” Pérez Tamayo (1998, p. 219). El criterio de demarcación de Popper determina que una teoría puede tener elementos, caminos, que al demostrar que no son parte de ella hagan que la misma pueda confirmarse como explicación afortunada.

Una teoría que no admite ninguna puesta a prueba no es la mejor, es todo lo contrario.

“Las tendencias en la filosofía de la ciencia más importantes en la segunda década de este siglo (el empirismo tipo Mill y el positivismo lógico) se basaban en la validez de la inducción, por lo que Popper consideró que habían llegado a un impasse y que la única forma de reorientarlas eran fundamentándolas no en los mecanismos usados para generar teorías sino más bien en los métodos para ponerlas a prueba.” Pérez Tamayo (1998, p. 219). Lo que nos dice Popper es que mediante la inducción el final del camino quería significar que ya se llegó al conocimiento, el propone que al final de la inducción se pongan a prueba las teorías así obtenidas mediante la refutación.

“… siguiendo su criterio de demarcación, Popper sugirió que tales pruebas deberían estar dirigidas a mostrar los aspectos falsos o equivocados de las teorías, y no a verificarlas o confirmarlas.” Pérez Tamayo (1998, p. 219).

Lo que vemos en muchas investigaciones es la forma o el camino de cómo se llegó a x conocimiento; no tenemos los elementos que nos hagan ver que de otra forma no se puede llegar a ese conocimiento y que por lo tanto esa es la teoría o el conocimiento inobjetable. En la práctica vemos como todos los estudios que hacen los jóvenes para adquirir un grado, la hipótesis inicial es deshechada si la verificación no es para confirmar la misma.

“Las teorías, de acuerdo con Popper, no son el resultado de la síntesis de numerosas observaciones, como quieren los inductivistas, sino más bien son conjeturas o invenciones creadas por los investigadores para explicar algún problema, y que a continuación deben ponerse a prueba por medio de confrontaciones con la realidad diseñadas para su posible refutación. Éste fue el origen de la versión popperiana del método científico conocido como hipotético-deductivo, que posteriormente se ha conocido como el método del "ensayo y error" o, mejor todavía, como el de "conjeturas y refutaciones". Pérez Tamayo (1998, pp. 219-221).

En este método hay que decir por qué un conocimiento científico es así y por qué refutando lo presentado no es de otra manera.

“Una característica esencial de las hipótesis en el esquema popperiano es que deben ser "falseables", o sea que deben existir una o más circunstancias lógicamente incompatibles con ellas.” Pérez Tamayo (1998, p. 221).

Si existen lógicamente circunstancias incompatibles con una hipótesis esta situación hace que lo que demuestra la hipótesis tenga más elementos que la confirmen.

“Las hipótesis son informativas sólo cuando excluyen ciertas situaciones observacionales, actuales o potenciales, pero siempre lógicamente posibles. Si una hipótesis no es falseable no tiene lugar en la ciencia, en vista de que no hace afirmaciones definidas acerca de algún sector de la realidad; el mundo puede ser de cualquier manera y la hipótesis siempre se adaptará a ella. Uno de los mejores ejemplos de este tipo de hipótesis no falseables (según Popper) es la teoría psicoanalítica clásica o freudiana, que tiene explicaciones plausibles para todos los fenómenos, aun aquellos totalmente opuestos entre sí; Popper cita en este mismo contexto algunas de las teorías marxistas de la historia.” Pérez Tamayo (1998, p. 221).

La falseabilidad hace que la hipótesis sea contrastada con todas las posibilidades que puedan ser, haciendo que la misma alcance un lugar en la ciencia.

“Resulta entonces que las hipótesis muy falseables son también las que se enuncian con mayor peligro de ser rápidamente eliminadas, pero en caso de resistir las pruebas más rigurosas e implacables, son también las que tienen mayor generalidad y explican un número mayor de situaciones objetivas.” Pérez Tamayo (1998, p. 221).

El que las hipótesis tengan una mayor o menor falseabilidad hace que el investigador profundice sus conocimientos, por el hecho de buscar cuáles son los enunciados afirmativos, en relación con la hipótesis que tendrá que refutar.

“Pero hay un argumento más en favor de las hipótesis audaces, que forma parte importante de la doctrina hipotético-deductiva del método científico: aprendemos de nuestros errores, la ciencia progresa por medio de conjeturas y refutaciones. Cuando un investigador intenta resolver un problema y no lo logra, lo primero que busca es en dónde está equivocado, en dónde está el error, si en su hipótesis o en su diseño experimental, o en sus observaciones o en sus comparaciones y analogías.” Pérez Tamayo (1998, pp. 221-222).

También el hecho de tener que falsear una hipótesis hace que en la búsqueda surjan nuevos conocimientos que servirán para otras investigaciones.

“El rechazo de una hipótesis una vez que no ha logrado superar las pruebas rigurosas a las que se ha sometido tiene un carácter más definido de progreso, de avance en el conocimiento, que la situación opuesta.” Pérez Tamayo (1998, p. 222).

En primera instancia parecería que si una hipótesis es obtenida por inducción con eso ya bastaría para que forme parte de la ciencia, hay que seguir investigando y refutarla, según Popper.

“En resumen, el esquema de Popper del método científico es muy sencillo y él mismo lo expresó en su forma más condensada en el título de su famoso libro, Conjeturas y refutaciones. La ciencia es simplemente asunto de tener ideas y ponerlas a prueba, una y otra vez, intentando siempre demostrar que las ideas están equivocadas, para así aprender de nuestros errores.” Pérez Tamayo (1998, p. 222).

El suponer que nuestras ideas están equivocadas y dedicarnos a buscar razones de por qué nos genera otras hipótesis que posiblemente no habíamos pensado.

“El hombre de ciencia (según Popper y sus seguidores) se asoma a la naturaleza bien provisto de ideas acerca de lo que espera encontrar, portando un esquema preliminar (pero no por eso simple) de la realidad. El problema surge cuando se registran discrepancias entre las expectativas del científico y lo que encuentra en la realidad; la ciencia empieza en el momento en que la estructura hipotéticamente anticipada de un segmento de la naturaleza no corresponde a ella.” Pérez Tamayo (1998, pp. 222-223). Es aquí donde el hombre de ciencia tiene que falsear lo que propone e integrar conocimientos nuevos a la ciencia.

“Naturalmente, el esquema inicial de la realidad del investigador es una hipótesis (consciente, o quizá con mayor frecuencia, inconsciente) derivada de todo lo que aprendió al respecto de sus antecesores + todo lo aportado por su experiencia personal en ese campo + toda su imaginación.” Pérez Tamayo (1998, p. 223).

Aquí Popper logra crear una realidad integrada por los diferentes elementos que componen eso que llamamos naturaleza social, humana y física.

9.- Imre Lakatos.

“En relación directa con el método científico, Lakatos escribe:

Existen varias metodologías flotando en la filosofía de la ciencia contemporánea, todas ellas muy diferentes de lo que se entendía por "metodología" en el siglo XVII y hasta en el XVIII. Entonces se esperaba que la metodología les proporcionara a los científicos un libro de recetas mecánicas para resolver problemas. Hoy ya se ha abandonado tal esperanza: las metodologías modernas o "lógicas del descubrimiento" consisten simplemente en un grupo de reglas (posiblemente no muy coherentes y mucho menos mecánicas) para la apreciación de teorías ya establecidas y articuladas... Estas reglas tienen una doble función: en primer lugar, sirven como un código de honestidad científica, cuya violación es intolerable; en segundo lugar, representan la esencia de programas de investigación historiográfica normativa.” Pérez Tamayo (1998, pp. 230-231).

Lakatos nos dice que no hay una metodología como una receta que indique cómo hacer investigaciones, sin embargo el pensamiento de los que ingresan al mundo de la investigación, con pocos recursos de la misma, es creer que efectivamente siguiendo una especie de receta se puede sustituir la creatividad con un procedimiento.

Lakatos (1922-1974).

“En otras palabras, la búsqueda de una metodología científica satisfactoria no es para contestar a la pregunta ¿cómo se hace la ciencia?, sino para establecer cómo debería hacerse y para investigar históricamente si así se ha hecho, cuándo y por quién.” Pérez Tamayo (1998, p. 231).

En el presente existe una problemática muy pronunciada en relación con la metodología para la ciencia: hay quienes creen que no debe haber método alguno y hay quienes sostienen que debe de haber método como camisa de fuerza.

Para Lakatos la investigación supone: la confrontación de la teoría inicial con nuevos datos, el registro de las diferencias, y la información que afecta gravemente al sistema al grado de cambiarlo.

10.- Paul Feyerabend.

Paul Feyerabend (1924 - 1994).

“En relación con el método científico, Feyerabend se declara anarquista: históricamente no hay nada que pueda identificarse como un método científico, el examen más crítico y riguroso de la ciencia contemporánea tampoco lo identifica, y el balance analítico de sus consecuencias futuras (si se promoviera) sería terriblemente negativo para la ciencia misma, para la libertad del individuo y para la estructura de la sociedad.” Pérez Tamayo (1998, pp. 242-243).

Feyerabend en realidad es anarquista, lo que dice sobre el método científico es la demostración de estar en contra de todo lo establecido; hemos visto que en la ciencia ha habido pronunciamientos de procesos que implican el trabajo científico, una manera de trabajar en ciencia.

“Pero a diferencia de los mismos autores, Feyerabend no concibe a la ciencia como una superación de las estructuras dogmáticas de esos tiempos sino simplemente como una opción alternativa, igualmente irracional y autoritaria, que finalmente triunfó no por su mayor coherencia lógica sino por su mejor rendimiento tecnológico.” Pérez Tamayo (1998, p. 244).

Lo que habría que cuestionarse con Feyerabend es si rechazando los beneficios que la ciencia le proporciona a la sociedad actual, así también rechaza los beneficios de la misma en su vida.

“Feyerabend inicia su libro Contra el método con el siguiente párrafo:

El siguiente ensayo está escrito con la convicción de que el anarquismo, aunque quizá no sea la filosofía política más atractiva ciertamente es una medicina excelente para la epistemología y para la filosofía de la ciencia.” Pérez Tamayo (1998, p. 244).

“…el capítulo I de ese mismo libro termina con su párrafo más famoso:

Queda claro, entonces, que la idea de un método fijo, o de una teoría fija de la racionalidad, descansa en una imagen demasiado simple del hombre y sus circunstancias sociales. Para aquellos que contemplan el rico material proporcionado por la historia y que no intentan empobrecerlo para satisfacer sus instintos más bajos o sus deseos de seguridad intelectual en forma de claridad, precisión, "objetividad" o "verdad", estará claro que sólo hay un principio que puede defenderse en todas las circunstancias y en todas las etapas del desarrollo humano. Este principio es: todo se vale.” Pérez Tamayo (1998, p. 244).

Si todo se valiera la existencia del hombre con todo lo que implica sería cuestión de poco tiempo, para el mismo hombre como para la naturaleza.

“…Feyerabend señala:

Mi intención no es reemplazar un juego de reglas generales por otro; más bien mi intención es convencer al lector de que todas las metodologías, incluyendo a las más obvias, tienen sus límites. La mejor manera de mostrar esto es demostrar no sólo los límites sino hasta la irracionalidad de algunas reglas que él o ella (los empiristas) posiblemente consideran como básicas...” Pérez Tamayo (1998, p. 245).

En esta afirmación tiene toda la razón, hay límites, pero el hecho de que los haya no implica pasar al extremo opuesto y acabar con la posibilidad del buen uso de los límites posibles.

“Por lo tanto, la ciencia está más cerca de la mitología de lo que la filosofía de la ciencia estaría dispuesta a admitir. Es solamente una de las muchas formas de pensamiento desarrolladas por el hombre, y ni siquiera necesariamente la mejor. Es conspicua, ruidosa e impúdica, y además sólo es intrínsecamente superior para aquellos que se han decidido previamente a favor de cierta ideología, o que la han aceptado sin antes examinar sus ventajas y sus límites.” Pérez Tamayo (1998, p. 246).

También es cierto que hay investigadores que se benefician del trabajo científico más de lo que debería ser, pero tampoco podemos decir que todos los investigadores se presentan en posición falsa y que toda la ciencia es un trabajo malsano.

“Hasta donde yo sé, Feyerabend sigue siendo el mismo profesor original, brillante e iconoclasta, de filosofía de la ciencia en California y en Viena, por lo que todos debemos felicitarnos. Su función es tan importante hoy como fue la de Sócrates en la Atenas de Pericles. Ojalá que la continúe desempeñando por muchos años; el mundo lo necesita ahora más que nunca.” Pérez Tamayo (1998, p. 247).

Esta afirmación de Pérez Tamayo es el pensamiento de un investigador que agradece el pensamiento de Feyerabend porque así los científicos critican su trabajo y se critican a sí mismos.

“Cuando se ha tratado de escoger entre dos o más teorías sobre los mismos fenómenos, la decisión nunca ha sido racional y objetiva porque las teorías distintas son inconmensurables. Dentro de esta anarquía, tanto el cambio como el crecimiento de la ciencia se explican por factores externos, como ideologías, preferencias subjetivas, estilo literario, propaganda, mercadotecnia, etc.” Pérez Tamayo (1998, pp. 247-248).

Esta situación que describe aquí Feyerabend, corresponde a la situación política y económica en que se genera la ciencia, depende de los intereses de las potencias y de los intereses personales de quienes trabajan dentro de la ciencia.



BIBLIOGRAFÍA

Pérez Tamayo, R. (1989). Cómo acercarse a la Ciencia. Limusa Noriega: México.

Pérez Tamayo, R. (2008). ¿Existe el Método Científico? Colegio Nacional y FCE: México.